miércoles, 13 de marzo de 2013

No es verdad...

En estos enlaces podemos ver varios artículos sobre educación de los cuales escribo la siguiente reflexión:



Para comenzar hablare de las leyes educativas que cambian sin ton ni son dependiendo de qué partido político esté gobernando, con esto quiero decir que da igual que partido político sea ya que cualquiera quiere dejar su marca en la educación son saber bien cómo hacerlo, pero hay tanto inculto en política que creen que están mejorando la educación, que pena me dan.

Otro tema a tratar es el acoso escolar que actualmente está apareciendo en los medios de comunicación, esto hace parecer que el acoso escolar se esté dando ahora pero realmente esto sucede desde siempre en las aulas. Todos conocemos al prototipo de alumno que es acosado y a su acosador. Una cosa que me ha llamado mucho la atención ha sido el pequeño porcentaje de profesores que se dan cuenta del acoso en sus aulas. Creo que deberían ser más observadores en este aspecto y así se podrían evitar muchos casos de bullying y los casos de asesinatos en los centros, ya que es tal la presión a la que se enfrentan los niños acosados que pueden llegar a estos extremos.

En cuanto a los profesores, en cierto modo los profesores ahora tienen menos autoridad en los colegios pero yo creo que no es necesario ser un profesor autoritario como antiguamente sino que deben de pedir disciplina a sus alumnos. El problema se encuentra en que en toda clase está el típico alumno chulo y maleducado que hace que las clases no puedan seguir su curso pero no se les podía sancionar, ahora es posible sacarlos de clase y llevarlos a Jefatura de Estudios pero al tener que acompañarlos las clases se pierden igualmente. Un problema que se deriva de aquí es que es actualmente la palabra del profesor no tiene valor, los padres creen la palabra de sus hijos sin preguntar qué es lo que ha pasado y de esta forma es muy difícil poder avanzar con los niños que aprovechan esta situación.

En cuanto a la metodología de los profesores, creo que está mejorando y no creo que al elevar el nivel se atente a la igualdad de oportunidades ya que se elevaría el nivel para todos y en la sociedad que estamos se necesita un cambio en la educación para llegar a dar lo máximo posible. Con esto no quiero decir que la educación sea pésima ya que aunque actualmente siempre se dice que la educación estaba mejor antes esto no es cierto. Hay muchas mejoras en educación, tanto en inversión, como en absentismo escolar, fracaso escolar, nivel intelectual, etcétera. Aunque si es cierto que debería seguir evolucionando para conseguir una educación mejor, de más calidad.

Dentro del manifiesto pedagógico podemos ver algunos aspectos interesantes como pueden ser el que se siga impartiendo un modelo tradicional, esto es así y creo que esto debe cambiar ya que estamos en el siglo XXI y seguimos impartiendo clase como en el siglo XX esto hace que no evolucionemos como deberíamos, aunque los profesores se están concienciando de que este cambio se tiene que lograr.
En la escuela española los niveles de exigencia no están bajando sino al contrario se están ampliando pero no está obteniendo los resultados que debería porque para conseguir esto la metodología tiene que cambiar como he citado en el párrafo anterior.

Los alumnos de ahora no son peores que los de antes sino diferentes y no se pueden comparar porque la sociedad ha cambiado mucho y las circunstancias en las que vivimos son muy diferentes a las pasadas.
El papel del profesor se ha visto muy deteriorado e insultado pero realmente el problema no estaba en ellos sino en la formación que habían tenido, este aspecto está siendo mejorado porque las nuevas generaciones de profesores están siendo preparados para el cambio que necesita la educación.

En cuanto a los principios que la escuela necesita estoy muy de acuerdo ya que solo así podremos realmente llegar a buen puerto, pero para esto se necesita que todos se conciencien, que si realmente se intenta se conseguirá.

En conclusión, el cambio es posible pero todos tenemos que poner nuestro granito de arena.  

¿Realidad o ficción? 
M.L

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